La carne de vacuno es un alimento básico en toda dieta equilibrada; ya que nos aporta proteínas y minerales, como el hierro, esenciales y necesarios para nuestro organismo.
Las posibilidades gastronómicas de la carne de vacuno son muy amplias siendo una pieza clave en el menú familiar.
Ganado rústico, de aptitud cárnica. Carne de excelente calidad con elevada proporción de grasa (intramuscular y muy poco superficial). Extraordinaria madurez, sabor y terneza
Carne natural de calidad conseguida de terneros mamando, sacrificados en edades comprendidas entre los 4 y 8 meses, complementando su alimentación con hierba seca y cereales ( cebada, etc …). Se consigue un producto de inigualable sabor y terneza. La carne de ternera lechal está recubierta de una capa de grasa natural blanca.
La alimentación de las vacas se realiza mediante el pasto y cuando este no es suficiente se complementa con hierba seca y cereales (cebada, trigo, maíz..), recogidos durante los meses de junio y julio. El ganado permanece en “la cabaña” desde principios de diciembre hasta finales de abril principios de mayo. Las fincas de recolección de forraje se abonan con estiércol en el otoño, con el fin de garantizar la previsión de recogida de hierba, tanto en calidad como en cantidad.
Nuestro secreto es la granja, en nuestro caso “la cabaña”; la comunicación sobre la explotación, producción, transparencia, marketing, relación calidad-precio, experiencia, manejo de ganado, ilusión por las cosas bien hechas, garantizando la procedencia de la carne. Siendo el objetivo la satisfacción y reconocimiento de nuestro cliente.